El ozono elimina virus, bacterias, hongos y olores desagradables

Desinfección de vehículos con ozono

Los vehículos son habitáculos cerrados con espacio muy reducido y muy expuestos a contaminación química y biológica (virus, bacterias, hongos...), debido a muchos motivos: entramos y salimos con frecuencia, montan distintas personas, suben y bajan niños con todo lo que ello conlleva, viajan adultos enfermos (algunos con enfermedades contagiosas), llevamos mascotas, nos trasladamos de un sitio a otro, algunos comen… Todas estas circunstancias son susceptibles de ocurrir en todos los coches, pero especialmente en los vehículos de uso comunitario como autobuses, taxis, coches de alquiler, ambulancias, camiones de bomberos, etc. Por otro lado, además de la proliferación en su interior de partículas contaminantes y microorganismos patógenos, suelen aparecer malos olores que muchas veces se hacen persistentes y muy desagradables.

Realizar una limpieza en profundidad del vehículo no es una tarea para nada rápida ni fácil, puesto que hay que frotar y desinfectar bien cada una de las partes del transporte y algunas son más complicadas de tratar que otras por la dificultad que conlleva llegar a ciertas zonas, como puede ser el caso de los circuitos de climatización o debajo de los asientos. También son complejos de higienizar los textiles y tapicerías, ya que requieren de un cuidado especial y no se pueden limpiar todos los días... Sin embargo, estos textiles son los que más olores y microorganismos cogen.

Con la aplicación de ozono gas en el interior del vehículo se consigue desinfectar el ambiente y superficies a través de vía aérea, eliminando virus, bacterias y cualquier tipo de olor en pocos minutos. De esta manera, se mejora el confort y la higiene ambiental previniendo todo tipo de enfermedades contagiosas, además. Esto se debe a que el gas ozono mediante contacto desinfecta sin distinción contra todos aquellos microorganismos que se cruzan por su camino.

El ozono es, en definitiva, un método de desinfección ideal para aplicarlo, además de en coches particulares, en taxis, ambulancias, autobuses, trenes, aviones, coches policiales y demás transportes colectivos.